APENDICE

Reflexiones sobre la obra de Scriabin escritas

 por el pianista Yevgeny Sudbin

Qué fácil es llegar a ser poseído por Scriabin, una de las personalidades artísticas más enigmáticas y controvertidas de todos los tiempos. Una vez que te ha mordido y el veneno, en forma de su mundo sonoro, entra en el cuerpo y en el alma, sus efectos te acorralan o incluso pueden ser una amenaza para la vida. No solo emocionalmente, como una desesperada búsqueda de respuestas solo resuelta en muchas preguntas, sino también físicamente, las reacciones pueden ser graves. Scriabin no fue solamente el primero de introducir la locura en la música, sino que también se las ingenió para sintetizarla en forma de un virus infeccioso que es completamente asistido por la música y afecta la psique de un modo fuertemente irracional.

Estas "experiencias místicas" han sido relatadas por los oyentes. Un crítico de Londres explica: "En mi propio caso, en dos ocasiones, he visto resplandecientes destellos de cegadoras luces de colores durante interpretaciones de la música de Scriabin... Algo totalmente diferente de la emoción o de la sensación de lágrimas de placer, estas emociones muy comúnmente asociadas a la música convencional... Esta experiencia me convenció de que la música de Scriabin modifica o gestiona las sensibilidades humanas de un modo misterioso e inconsciente. Descubre fuentes todavía poco documentadas o insuficientemente comprendidas".

Otros espectadores han descrito haber experimentado visiones de olas de luz, barcos dorados en océanos violetas, y rayos de fuego durante interpretaciones de su música, aun sin la ayuda del LSD. Sin embargo, reflexionando seriamente: si los efectos son tan radicales en la parte del receptor final, no son realmente menos intensos en la parte del intérprete.

Cuando por primera vez me vi relacionado con la música de Scriabin, este autor lo eclipsó todo en mi vida. La pasión y la curiosidad por la música y la persona parece autoalimentada y también destructiva por su naturaleza, casi como un tipo de lujuria que no se puede frenar. A pesar de que no estaba siempre nadando en "océanos violetas", los penetrantes sonidos cósmicos que implosionan espacio y tiempo y los frecuentes subcontextos eróticos, encendieron cada célula de mi cuerpo. Como ocurre con todas las reacciones desproporcionadas, es crucial lo que queda después de que las sensaciones iniciales se enfríen. Este residuo se podrá condensar unas veces en un permanente respeto o evaporarse como el humo.

¿Qué es lo que pasa con Scriabin que hace que su veneno sea tan ponzoñoso? Además de ser un compositor pianista, poeta, solipsístico, semi-, neo- y teofilósofo, taumaturgo musical y mistagogo y estos son solo una parte de sus trabajos a tiempo parcial, sus hobbies, era sobre todo un visionario adelantado a su tiempo. (A veces un poco decepcionado, quizás, pero esto nunca ha frenado la grandeza desde sus inicios).

En efecto, para juzgarlo mediante alguno de sus últimos poemas, que acompañan frecuentemente a sus composiciones, podría haber estado a la cabeza de toda la humanidad:

He venido para contarte el secreto de la vida

El secreto de la muerte

El secreto del cielo y de la tierra.

 

Si piensas que esto es demasiado profundo, juzga esto:

¡Soy Dios!

No soy nada, soy juego, soy libertad, soy vida.

Soy la frontera, soy la cumbre.

Frecuentemente se ha buscado un paralelismo entre Cristo y Scriabin, y, graciosamente, el propio Scriabin hizo poco para disuadir a la gente que lo hiciera. Le gustaba aclarar sus sueños mientras estaba subido en una silla, como si flotara en el aire. También se debe mucho al factor que, como Cristo, Scriabin nació en el día de Navidad (de 1871 según el calendario Juliano), y murió por Pascua (de 1915). En una ocasión intentó caminar sobre el agua del lago de Ginebra. Cuando fracasó, se contentó con predicar a los pescadores desde un bote. Los amigos de Scriabin describen su modo de andar como si estuviera "flotando": saltaba, corría, brincaba, hacía cabriolas. De hecho incluso llevó a cabo 'experimentos de flotación' con su mujer, intentando transportar su cuerpo por el aire. Una vez cuando se acercaba a un puente, exclamó que podía lanzarse sobre la barandilla y mantenerse 'suspendido en el aire... sano y salvo'. (Solo una persona le pidió una demostración.) El resultado es que a Scriabin se le ocurrió el concepto de vzlyot (vuelo o empuje) que puede encontrarse frecuentemente en su música. (Por ejemplo en el inicio de su Sonata Nº5).

Mientras que Scriabin puede haberse visto como una especie de Mesías cuestionándose la liberación espiritual, su objetivo era mostrar como la humanidad podía por si misma llegar a convertirse en Dios. La manera de realizarlo era a través del arte, pues, para Scriabin, el arte estaba por encima de cualquier cosa y de todo el mundo. Muchas de sus meditaciones filosóficas estaban basadas en la teosofía, en la cual la experiencia de Dios se alcanza a través del éxtasis espiritual. Influenciado previamente por el concepto del Übermensch de Nietzsche, Scriabin llegó a la teosofía casi de una manera intuitiva y la combinó con una infusión de misticismo.

Mientras que algunos compositores exploraron el misticismo y el simbolismo en sus obras (como Strauss en "Muerte y Transfiguración" o Schönberg en "La noche transfigurada"), Scriabin fue el primero hasta la fecha de invocar el misticismo en lugar de retratarlo. En efecto, el paralelismo más próximo puede encontrarse en el poeta William Blake o en el pintor Nicholas Roerich.

Scriabin fue también el primero de introducir el sexo en su música, además de un modo bastante evidente. Mientras que se respetaba el reconocido romanticismo de Brahms y los jardines de tentaciones mundanas de Wagner, Scriabin se colocó a varios escalones por arriba, cuando escribió música titulada Deseo, Caricia danzada, Delicias Sensuales y especialmente el Poema del Éxtasis. Algunos de los pasajes del poema que lo acompaña dejan poco a la imaginación y son demasiado explícitos para mencionarlos (como es realmente la música, pero aún la censura tiene un límite).

Los soviéticos podían oler la grandeza desde muy lejos, pero para hacer a Scriabin compatible con su lavado de cerebro, su tensa propaganda socio-realista, no tuvieron más remedio que obscurecerlo y caricaturizarlo, y de una manera bastante perversa. Con una completa ignorancia de los contextos sexuales y místicos, Scriabin fue convertido en un revolucionario, una mascota para los cosmonautas. 'Una síntesis triunfal del concepto de arte y revolución', resumía la revista Música Soviética, y cuando el cosmonauta Yuri Gagarin realizó el primer vuelo espacial, fue, totalmente de un modo impropio, el Poema del Éxtasis lo que llegó a las ondas de la radio. Este proceso encuentra su ideológica razón de ser en el dicho de Lenin: 'Si tenemos delante de nosotros a un verdadero gran artista, entonces debe representar en sus obras ciertos aspectos esenciales de la Revolución, aún en los casos en que no lo entienda claramente y lo evite abiertamente.'

Sin embargo la percepción occidental de Scriabin no ha sido tampoco perfecta y aquí se encuentra la ironía: mientras a los soviéticos se les 'ordenó' entender mal a Scriabin, la mayoría de la audiencia occidental lo hizo voluntariamente. No pudo ser ayudado; los significados de su música se interpretaron como locura. Esto, combinado con la naturaleza eufórica de la música, frecuentemente condujo a opiniones caprichosas, dando lugar a que su audiencia no apareciese menos loca que la música.

Había también controversia mirando la personalidad de Scriabin. Recuerdos de cuatro personas diferentes discordaban de cosas tan triviales como el color de sus ojos (eran de color avellana). También relatos sobre la aparente repugnancia de sentarse sobre la hierba por miedo a las picaduras de nigua[1] o su rechazo a llevar sombrero levantan algunas sospechas, cuando encontramos varias fotografías suyas echado felizmente sobre el césped y aun peor, en ¡una donde lleva un sombrero! Siempre se ha dicho que llevaba un peine, pasando mucho tiempo cepillándose el cabello y el bigote para estar perfecto. Sin embargo encontramos un retrato serio en el cual su cabello y su apariencia general es totalmente desaliñada. Ha habido también algunos intentos para explorar la posibilidad de homosexualidad como respuesta a ciertas preguntas. Por su característica esto solo cuestiona muchas respuestas: mientras Robert Craft describe a Scriabin como un 'hermafrodita emocional', Henry-Louis de la Grange concluye que Scriabin tenía un 'complejo de impotencia invertida'.

Yevgeny Sudbin 2007

SUBDIN

Yevgeny Sudbin, en ruso Евгений Судьбин, nació en San Petersburgo en 1980, estudiando en su Conservatorio. Su familia emigró a Berlín cuando tenía 10 años. Estudió en la Hochschule für Musik Hanns Eisler y más tarde en la Purcell School y en la Royal Academy of Music durante nueve años.

Desde 1997 vive en el Reino Unido debutando en los Proms en julio de 2008 y casándose el mismo mes con Sally Wei en Italia. En el mes de septiembre de 2010 es nombrado profesor de piano de la Royal Academy of Music en Londres. Ha grabado varios discos para el sello sueco BIS.

[1] Las niguas son un tipo de ácaro rojo muy pequeño (la mayoría sólo pueden verse con una lupa). Los ácaros son arácnidos.