WILMS

Johann Wilhelm Wilms (1772-1847) nació el 30 de marzo de 1772 en Witzhelden, un pueblo situado a unos 25 km al nordeste de Colonia, en el antiguo Ducado de Berg, que en 1815 después de la derrota de Napoleón pasó al Reino de Prusia. Actualmente la región del Bergische Land, pertenece al estado de Nordrhein Westfalen, integrado en la República Federal de Alemania.

Sus primeras lecciones musicales las recibió de su padre, maestro de escuela y organista, de su hermano mayor y del pastor de la parroquia. Para continuar sus estudios se traslada primero a Lüttringhausen y a Eberfeld, para marchar en 1791 a Ámsterdam.

Trabaja como pianista y flautista en la orquesta Felix Meritis. En 1796 es cofundador de la compañía musical Eruditio Musica actuando como pianista y luego con sus propias obras, compuestas en el tiempo que le queda libre. En el año 1798 los comentarios sobre sus obras llegan a los periódicos musicales de Leipzig.

En diciembre de 1805 se casa con Nicoletta Versteegh, la hija de un acaudalado coleccionista de arte. Sus obras se interpretan en los países germánicos, siendo el compositor más famoso de Ámsterdam.

Sus primeras sinfonías se encuentran en el periodo de transición, entre la muerte de Mozart y las primeras sinfonías de Beethoven.

La “Sinfonía Nº 1 en do mayor” Op.9 fue estrenada en el día de Año Nuevo de 1806 en la Gewandhaus de Leipzig. No se sabe la fecha de su composición pero su primera impresión se realizó en el otoño de 1805. Recibió una crítica bastante positiva del Allgemeine Musikalische Zeitung, parte de la cual traducimos a continuación.

Se ha escuchado con placer y se la escuchará por todos los sitios con placer, interpretada con correcto tempo y precisión, a pesar del hecho de que se le podrían indicar al compositor muchas reminiscencias, tanto en las propias ideas como en su tratamiento, esencialmente de la Sinfonía en do mayor de Beethoven. En conjunto se percibe un espíritu lleno de frescor y de juventud, sin estar desprovisto de energía y de profundos conocimientos de armonía, además de gracia, humor y de un arte consumado de instrumentación. El finale se distingue particularmente por su originalidad y por cierto tratamiento picante innegable aunque no se pueda expresar en palabras.

El primer movimiento, adagio, allegro vivace, está compuesto en forma sonata empezando con una introducción lenta influenciada por la primera sinfonía de Beethoven. El primer tema del allegro es animado parecido a la música de Haydn, pero con una instrumentación más rica en instrumentos de viento. En contraste el segundo tema es lento y más relajado dominado por la madera. Después de la recapitulación una animada coda cierra el movimiento

El segundo movimiento, andante, es un movimiento lento escrito en forma de arco dividido en tres secciones, A, B, A'. El tema principal presentado en modo menor está influenciado también por la música de Haydn. En la sección intermedia un solo de clarinete nos presenta un nuevo tema derivado del primero. En la reexposición de la sección final el tema es presentado en una forma variada.

El tercer movimiento, menuetto, allegro, trio, menuetto da capo, nos presenta un tema de danza que recuerda al utilizado por Beethoven en su primera sinfonía. El trío introducido por el oboe presenta una danza popular en forma contrastante. Termina con la repetición abreviada de la primera sección.

El cuarto movimiento, finale, allegro, se presenta como una forma de sonata monotemática. con también evidentes signos de la influencia de Haydn. Pero muestra características personales en el desarrollo de los temas.

La “Sinfonía Nº 2 en fa mayor” Op.10 se encuentra desaparecida y parece que se publicó en el año 1808. En la misma época también se publica su "Concierto para piano en do mayor" Op.12 que nos recuerda a los de Mozart.

La “Sinfonía Nº 3 en mi bemol mayor” Op.14 se publicó como más tarde, en el mes de abril de 1809. Se supone que su estreno en Ámsterdam se efectuó a mediados de la década de 1790. Los años de las publicaciones, no nos aportan ningún dato sobre las fechas de su composición.

Su estilo es clásico, semejante a las obras de Haydn, lo cual nos haría pensar que es anterior a la época de Beethoven o que se trata de un compositor muy conservador. El musicólogo Dr. Ernst A. Klusen, especializado en la obra de Wilms, estableció que la tercera sinfonía estaba compuesta en realidad en el año 1793, aportando además las particelas originales de varias de las sinfonías. Por todo ello se podría pensar que en realidad se trata de su primera sinfonía.

El primer movimiento, adagio, allegro, empieza con una introducción lenta a la que sigue un allegro en forma sonata. El primer tema es enérgico con cierta influencia de Mozart, especialmente visible en el segundo tema melódico de carácter contrastante. Sigue mediante un clásico desarrollo y una recapitulación abreviada que nos conduce a la enérgica coda.

El segundo movimiento, andante poco allegretto, nos presenta un tema al estilo de Haydn. escrito en forma tripartita A, B, A'. La sección central posee un carácter más moderado, para reemprender seguidamente el tema inicial.

El tercer movimiento, menuetto, trio, menuetto, nos presenta un tema parecido al del anterior movimiento pero con un ritmo más marcado. El trío es más relajado pero escrito en un estilo similar. Termina recuperando el ritmo inicial con el tema presentado en forma abreviada.

El cuarto movimiento, rondo, allegro, posee claras influencias de la música de Mozart, como se puede notar en su rítmico tema principal, que se va repitiendo a lo largo del movimiento, separado por varios motivos derivados.

Una sinfonía escrita en un lenguaje muy clásico. Su tardía publicación en el año 1809 coincide con el de la tercera de Beethoven con la que no puede competir.

La “Sinfonía Nº 4 en do menor” Op.23 fue escrita alrededor de 1805 habiéndose interpretado en Ámsterdam a finales de 1807 y publicada en el otoño de 1812 por la editora Breitkopf, logrando un gran éxito en su presentación en la Gewandhaus de Leipzig el 29 de septiembre de 1812. El título original dice Sinfonía para gran orquesta, que en aquella época consistía en madera por duplicado, dos trompas, dos trompetas, timbales y cuerda.

El primer movimiento, adagio, allegro con motto, empieza con una introducción de carácter serio que desarrolla ampliamente. El allegro escrito en forma sonata nos presenta el primer tema mediante la cuerda. El segundo tema es interpretado por los violines acompañados por trompa y fagot. Durante el desarrollo elementos de los dos temas se combinan de diversas maneras. Una reexposición de modo abreviado da paso a una amplia coda, que empieza recordando el tema de la introducción. Termina de modo brillante.

El segundo movimiento, andante, posee la forma de sonata monotemática. Tanto la exposición como el desarrollo ocupan pocos compases. Mientras que la reexposición está aumentada por un amplio pasaje concertante, en el que dialogan las maderas y los solistas de la cuerda, terminando a modo de epílogo con el tema principal.

El tercer movimiento, menuetto, trio, menuetto, nos muestra un tema que empieza en ritmo binario y en modo menor. En contraste el trío escrito en modo mayor está interpretado por la madera y las trompas. Finalmente se recupera el tema inicial de forma abreviada.

El cuarto movimiento, rondo, allegro, escrito en forma sonata empieza mediante un tema inquietante que pronto nos transporta al segundo tema que contiene frases más líricas. Como en el primer movimiento termina mediante una amplia coda que culmina de modo radiante.

El "Concierto para flauta en re mayor" Op.24 fue entregado para su publicación en 1811. Se trata de una obra ligera y agradable que también se relaciona con el estilo de Mozart.

La “Sinfonía Nº 5 en re mayor” Op.52 debió de publicarse entre los años 1814 y 1819 en Ámsterdam por la empresa berlinesa Hummel, pero por su estilo parece haber sido compuesta en la época de su Op.14.

El primer movimiento, adagio, vivace, escrito en forma sonata al estilo de Haydn denota pertenecer a la primera época del compositor. Una introducción lenta nos conduce al tema principal del allegro cuyo carácter enérgico contrasta con el tema secundario

El segundo movimiento, poco adagio, escrito en forma lied en tres partes, introduce un tema lento de carácter lírico, que contiene una parte central con una variante para terminar recordando el tema principal.

El tercer movimiento, menuetto, allegro, nos presenta un tema rítmico de danza, un clásico minueto. El trío es de carácter contrastante con una parte melódica al estilo de música de cámara recordando a Mozart. Luego se regresa a la danza inicial sin repeticiones.

El cuarto movimiento, rondo, allegro, posee un tema principal de carácter rítmico, que se va repitiendo alternando con secciones diversas aportando nuevas ideas. Una amplia coda cierra con ímpetu y solemnidad la sinfonía.

En el año 1813 Wilms compone unas “Variaciones para orquesta sobre el antiguo himno nacional Wilhelmus van Nassauen”, una obra patriótica. En 1816 es vencedor de un concurso para la composición del himno nacional neerlandés “Wien Neêrlands Bloed ...”.

La “Sinfonía Nº 6 en re menor” Op.58 fue compuesta entre los años 1819 y 1820. Con esta obra gana el primer premio de la Sociedad Real de Bellas Artes y Literatura de Gante. La obra se publicó en Leipzig en 1823. Está orquestada para dos flautas, dos oboes, dos clarinetes, dos fagots, dos trompas, dos trompetas, timbales y cuerda.

El primer movimiento, adagio, allegro molto e con fuoco, contiene una introducción lenta donde se apuntan los temas. El primer tema del allegro tiene influencias de Mozart. El segundo es gratamente melódico, realzado por la madera. Durante el desarrollo los temas se cruzan en clásicos juegos contrapuntísticos. Después de la reexposición termina con una corta coda.

El segundo movimiento, andante quasi allegretto e grazioso, nos presenta una música de carácter pastoral con ingenuas melodías, representando un mundo feliz, pero situado en un ambiente cortesano.

El tercer movimiento, scherzo, allegretto, trío, es de carácter agitado, con un estilo más moderno que el de sus anteriores sinfonías, con evidente influencia de Beethoven. El trío que puede considerarse como un nuevo scherzo, también posee elementos rítmicos. Finalmente se repite la parte inicial de modo abreviado.

El cuarto movimiento, rondó, allegro molto, posee un tema principal alegre, en forma de danza con episodios contrastantes. El movimiento se va acelerando hasta llegar a una concluyente coda.

Trágicos acontecimientos oscurecen la vida de Wilms. Durante el verano de 1821 su mujer Nicoletta, que había dado a luz una hija muerta, fallece pocas semanas más tarde. En el mismo año, debe acompañar a la tumba a otra hija de dos años y medio y a su suegro además de amigo, Dirk Versteegh. Estos hechos influyen en su vida artística, perdiendo interés en la composición, tanto que no publicará ninguna obra sinfónica más.

Los cambios producidos en los estilos musicales, especialmente al conocerse las sinfonías de Beethoven, hacen que las sinfonías de Wilms pierdan interés y no se interpreten nuevamente en Leipzig.

La revolución de julio de 1830 en París, enciende los ánimos de los insatisfechos belgas. Guillermo I envía sus tropas para detener la sublevación pero sus esfuerzos son inútiles. Las provincias católicas del sur de los Países Bajos se declaran independientes constituyendo un nuevo estado, el Reino de Bélgica, pronto reconocido por muchos países.

Wilms contribuye a esta explosión de nacionalismo componiendo cantos patrióticos para las provincias del norte. La influencia de la música revolucionaria francesa se hace sentir en Wilms especialmente en su última sinfonía.

La “Sinfonía Nº 7 en do menor” fue compuesta en 1832. Fue necesario esperar hasta el año 1836 para poder escuchar el primer movimiento. Después la partitura desapareció y se olvidó. 170 años después de su composición se imprime por primera vez y el estreno íntegro se realiza en el festival de Ambronay 2002, interpretada por el conjunto orquestal Concerto Köln dirigido por Werner Ehrhard.

La obra está orquestada para dos flautas, dos oboes, dos clarinetes, dos fagots, cuatro trompas, dos trompetas, tres trombones, timbales y cuerda.

El primer movimiento, andante, allegro, empieza con una introducción grave, que contiene un tema solemne. Los dos temas del allegro tienen un cierto carácter de la música revolucionaria francesa, especialmente el tema lírico en forma de canto patriótico. A lo largo del desarrollo se repetirá el tema, hasta llegar a su reexposición, terminando con una determinante coda.

El segundo movimiento, poco adagio, posee un delicado tema lírico. Si en el anterior movimiento sentíamos la voz heroica de un Beethoven, en este aparece la delicadeza de un Mozart. En la parte central encontramos interesantes efectos contrapuntísticos. Luego se repite la primera parte de modo variado, volviéndose el tema más solemne.

El tercer movimiento, scherzo, trio, es un breve scherzo que nos presenta un tema rítmico con ligeros toques marciales, incluyendo un trío más delicado de características melódicas. Pronto regresa el tema inicial.

El cuarto movimiento, allegro con fuoco, contiene un tema heroico, contrastando con otro semejante a un canto patriótico en forma de himno. Influenciado por Beethoven continúa con un desarrollo que nos lleva hacia la sección triunfal que cierra la obra.

Wilms también compuso música de cámara, como sus dos cuartetos con piano y sonatas para violín y para piano a cuatro manos, entre otras.

El último trabajo oficial de Wilms termina en 1841, cuando abandona su colaboración con la Sociedad para el desarrollo musical, Maatschappij tot Bevordering der Toonkunst (MBT), institución con la cual había colaborado desde su fundación en 1829. Muere en Ámsterdam el 19 de julio de 1847.