LA SINFONIA EN HOLANDA

VERHULST

27 - La Sinfonía en Holanda

El nombre correcto es el de Países Bajos (Nederland). El origen del nombre popular con que se designa a esta nación, procede del que llevan sus dos provincias más importantes Noordholland y Zuidholland. Etimológicamente procede de la antigua palabra frisia Holtland o país de la madera. Alrededor de este centro se configuraron los Países Bajos. Por ello los extranjeros llaman con el nombre de Holanda al Reino de los Países Bajos.

No repetimos los acontecimientos que llevaron a Bélgica a su separación de los Países Bajos en 1830, dando nacimiento a la actual Holanda, puesto que ya ha sido comentado en el capítulo dedicado a la Sinfonía en Bélgica. En la segunda mitad del siglo XIX los Países Bajos quedan gobernados por una monarquía constitucional.

Una institución importante fue la Maatschappij tot Bevordering der Toonkunst (MBT), la Sociedad para el desarrollo musical, fundada en 1829 para la promoción de la música en los Países Bajos. La escuela real de música de Amsterdam se convertirá mas tarde en su Conservatorio.

La orquesta de la Corte del rey Guillermo I era conocida como la Capilla Real. Pero pronto nacen instituciones privadas. La primera empresa para la organización de conciertos en Amsterdam fue la compañía Eruditio Musica, entre cuyos fundadores se encuentra el compositor Johann Wilms. Por todo el país nacen promotores de conciertos como la Sociedad Diligentia en La Haya y orquestas como el Collegium Musicum Ultrajectinum de Utrech. La Maatschappij Felix Meritis se convierte en el mejor conjunto del país, antes de la fundación de la Orquesta del Concertgebouw de Amsterdam el 3 de noviembre de 1888.

Esta orquesta, que cambiará su nombre en el año de su centenario, 1988, por el de Orquesta Real del Concertgebouw, está considerada como una de las mejores de Europa. Sus 120 profesores han sido dirigidos desde su fundación, primeramente por Willem Kes, desde el año 1888 al 1895. Pero su fama se logró de la mano del gran director Willem Mengelberg, que durante 50 años, entre 1895 y 1945, mostró su maestría, teniendo además como invitados a los más importantes músicos de la época, como Richard Strauss, Mahler, Debussy o Rachmaninov. La sala de conciertos, el famoso Concertgebouw se inauguró el 11 de abril de 1888.

El especial carácter de los holandeses, dando poca importancia al nacionalismo frente a unos ideales más amplios, les reportó excelentes resultados en el campo de los negocios, al comportarse como un pueblo abierto a todas las influencias. Pero en el campo de la música los resultados han sido muy diferentes. Al defender una música europea descuidan la música nacionalista. Amsterdam, La Haya, Utrech, se convierten en centros musicales invitando a compositores de toda Europa pero descuidan la producción propia. Parece que entre Sweelinck (1562-1621) y Alphons Diepenbrock (1862-1921) no exista nada.

La primera sinfonía romántica importante escrita en los Países Bajos es la de Johannes Verhulst. Anteriormente encontramos a Wilms, un compositor de origen alemán que compuso siete sinfonías, con un estilo clásico. Lo incluimos entre los compositores neerlandeses debido a que su obra se realizó en Holanda, integrándose con su pueblo y componiendo el himno nacional de los Países Bajos. Johannes van Bree (1801-1857) también compuso dos sinfonías, pero fueron poco interpretadas en su época. En la siguiente generación aparece Richard Hol, cuyas cuatro obras comentaremos a continuación.

Johann Wilhelm Wilms  (1772-1847) nació el 30 de marzo de 1772 en Witzhelden, un pueblo situado a unos 25 km al nordeste de Colonia, en el antiguo Ducado de Berg, que en 1815 después de la derrota de Napoleón pasó al Reino de Prusia. Actualmente la región del Bergische Land, pertenece al estado de Nordrhein Westfalen, integrado en la República Federal de Alemania.

Sus primeras lecciones musicales las recibió de su padre, maestro de escuela y organista, de su hermano mayor y del pastor de la parroquia. Para continuar sus estudios se traslada primero a Lüttringhausen y a Eberfeld, para marchar en 1791 a Amsterdam.

Trabaja como pianista y flautista en la orquesta Felix Meritis. En 1796 es cofundador de la compañía musical Eruditio Musica actuando como pianista y luego con sus propias obras, compuestas en el tiempo que le queda libre. En el año 1798 los comentarios sobre sus obras llegan a los periódicos musicales de Leipzig.

En diciembre de 1805 se casa con Nicoletta Versteegh, la hija de un acaudalado coleccionista de arte. Sus obras se interpretan en los países germánicos, siendo el compositor más famoso de Amsterdam.

Sus primeras sinfonías se encuentran en el periodo de transición entre la muerte de Mozart y las primeras sinfonías de Beethoven. La primera de ellas es la “Sinfonía Nº 1 en do mayor” Op.9 estrenada en 1806 en Leipzig.

La “Sinfonía Nº 2 en fa mayor” Op.10 se encuentra desaparecida y parece que se publicó en el año 1808. La “Sinfonía Nº 3 en mi bemol mayor” Op.14 se publicó como más tarde, en el mes de abril de 1809. La “Sinfonía Nº 4 en do menor” Op.23 fue publicada en el otoño de 1812. Finalmente la “Sinfonía Nº 5 en re mayor” Op.52 debió de publicarse entre los años 1814 y 1819.

Los años de sus publicaciones, no nos aportan ningun dato sobre las fechas de sus composiciones. Su estilo es clásico, semejante a las obras de Haydn, lo cual nos haría pensar que son anteriores a la época de Beethoven o que se trata de un compositor muy conservador. El musicólogo Dr. Ernst A. Klusen, especializado en la obra de Wilms, estableció que la tercera sinfonía estaba compuesta en realidad en el año 1793, aportando además las particelas originales de varias de las sinfonías.

En el año 1813 compone unas “Variaciones para orquesta sobre el antiguo himno nacional Wilhelmus van Nassauen”, una obra patriótica. En 1816 es vencedor de un concurso para la composición del himno nacional neerlandes “Wien Neêrlands Bloed ...”.

La “Sinfonía Nº 6 en re menor”  Op.58 fue compuesta entre los años 1819 y 1820. Con esta obra gana el primer premio de la Sociedad Real de Bellas Artes y Literatura de Gante. La obra se publicó en Leipzig en 1823. Está orquestada para dos flautas, dos oboes, dos clarinetes, dos fagots, dos trompas, dos trompetas, timbales y cuerda.

El primer movimiento adagio, allegro molto e con fuoco, contiene una introducción lenta donde se apuntan los temas. El primer tema del allegro tiene influencias de Mozart. El segundo es gratamente melódico, realzado por la madera. Durante el desarrollo los temas se cruzan en clásicos juegos contrapuntísticos. Después de la reexposición termina con una corta coda.

El segundo movimiento andante quasi allegretto e grazioso nos presenta una música de carácter pastoral con ingenuas melodías, representando un mundo feliz, pero situado en un ambiente cortesano. El scherzo es de carácter agitado, con un estilo más semejante a Beethoven, conteniendo un trio que puede considerarse como un nuevo scherzo.

Termina con un movimiento en forma de rondó. El tema principal es alegre, en forma de danza con episodios contrastantes. El movimiento se va acelerando hasta llegar a una concluyente coda.

Trágicos acontecimientos oscurecen la vida de Wilms. Durante el verano de 1821 su mujer Nicoletta, que había dado a luz una hija muerta, fallece pocas semanas mas tarde. En el mismo año, debe acompañar a la tumba a otra hija de dos años y medio y a su suegro además de amigo, Dirk Versteegh. Estos hechos influyen en su vida artística, perdiendo interés en la composición, tanto que no publicará ninguna obra sinfónica más.

Los cambios producidos en los estilos musicales, especialmente al conocerse las sinfonías de Beethoven, hacen que las sinfonías de Wilms pierdan interés y no se interpreten en Leipzig.

La revolución de julio de 1830 en París, enciende los ánimos de los insatisfechos belgas. Guillermo I envía sus tropas para detener la sublevación pero sus esfuerzos son inútiles. Las provincias católicas del sur de los Países Bajos se declaran independientes constituyendo un nuevo estado, el Reino de Bélgica, pronto reconocido por muchos países.

Wilms contribuye a esta explosión de nacionalismo componiendo cantos patrióticos para las provincias del norte. La influencia de la música revolucionaria francesa se hace sentir en Wilms especialmente en su última sinfonía.

La “Sinfonía Nº 7 en do menor” fue compuesta en 1832. Fue necesario esperar hasta el año 1836 para poder escuchar el primer movimiento. Después la partitura desapareció y se olvidó. 170 años después de su composición se imprime por primera vez y el estreno íntegro se realiza en el festival de Ambronay 2002, interpretada por el conjunto orquestal Concerto Köln dirigido por Werner Ehrhard. La obra está orquestada para dos flautas, dos oboes, dos clarinetes, dos fagots, cuatro trompas, dos trompetas, tres trombones, timbales y cuerda.

El primer movimiento andante, allegro empieza con una introducción grave, que contiene un tema solemne. Los dos temas del allegro tienen un cierto carácter de la música revolucionaria francesa, especialmente el tema lírico en forma de canto patriótico. A lo largo del desarrollo se repetirá el tema, hasta llegar a su reexposición, terminando con una determinante coda.

El segundo movimiento poco adagio posee un delicado tema lírico. Si en el anterior movimiento sentíamos la voz heroica de un Beethoven, en este aparece la delicadeza de un Mozart. En la parte central encontramos interesantes efectos contrapuntísticos. Luego se repite la primera parte de modo variado, volviéndose el tema más solemne. Continúa con un breve scherzo con ligeros toques marciales, incluyendo un trio más delicado.

Termina con un allegro con fuoco que contiene un tema heroico, contrastando con otro semejante a un canto patriótico en forma de himno. Influenciado por Beethoven continúa con un desarrollo que nos lleva hacia la sección triunfal que cierra la obra.

El último trabajo oficial de Wilms termina en 1841, cuando abandona su colaboración con la  Sociedad para el desarrollo musical, Maatschappij tot Bevordering der Toonkunst (MBT), institución con la cual había colaborado desde su fundación en 1829. Muere en Amsterdam el 19 de julio de 1847.

Johannes Verhulst (1816-1891) nace en La Haya el 19 de marzo de 1816. Canta en el coro de la iglesia y su interés por la música llama la atención de Heinrich Lübeck, director de la Escuela de Música Real. Convence a sus padres, pequeño burgueses, que deseaban que su hijo trabajara como litógrafo, consiguiendo que le dejen estudiar teoría de la música y violín.

En 1831 trabaja como violinista en la Orquesta de la Capilla Real, la orquesta de la corte de Guillermo I. Mientras estudia composición con Christiaan Hanssens, director del Teatro francés de La Haya.

Mendelssohn se encuentra en el año 1836 en Scheveningen, la estación balnearia cerca de La Haya. Lübeck le presenta una partitura de las que el joven Verhulst había escrito. Su entusiasmo es tan grande que lo invita a Leipzig, para que pueda estudiar con él. Así, en el mes de enero de 1838 marcha para estudiar en Alemania, donde estará cinco años. Allí conoce a los grandes compositores de su época.

Verhulst es nombrado director de la sociedad musical Euterpe, muy popular en Leipzig, siendo la competencia directa de la Orquesta del Gewandhaus.

La “Sinfonía en mi menor” Op.46 fue compuesta en Leipzig entre los meses de abril y octubre de 1841. El 17 de noviembre empezaron los ensayos, estrenándose el 24 de enero de 1842 en uno de los conciertos de la institución Euterpe, dirigido por el mismo compositor. La crítica y el público alabó su arte, excepto una crítica que señalaba la monotonía de sus temas. Cuando regresó a Holanda dirigió varias veces la sinfonía. En 1854 se estrenó en Amsterdam con un éxito triunfal. Se siguió interpretando hasta la muerte del compositor, luego se olvidó.

El primer movimiento largo maestoso, allegro agitato, muestra múltiples influencias de la música germánica, especialmente de Beethoven y Mendelssohn. Debe pensarse que se trata de una obra de juventud, sin tener todavía un estilo determinado. Después de una corta introducción lenta se presentan dos temas poco contrastados, que tomarán parte en un amplio desarrollo de variada coloración orquestal.

El segundo movimiento andante se compone de un tema sencillo con variaciones. Posee una armonía que podría ser de Schumann junto a detalles de Haydn, especialmente en su comienzo. El scherzo tiene gran empuje rítmico con un trio poco contrastado.

Termina con un finale con brio lleno de fuerza en su tema principal, con influencias de Mendelssohn en su tratamiento, principalmente durante el desarrollo.

Cuando Verhulst regresa a los Países Bajos se presenta como un notable director de orquesta y compositor. Dirige sus propias obras y el rey Guillermo II lo nombra caballero, ofreciéndole la dirección de la Capilla Real. En 1848 toma el cargo de director musical de la delegación de Rotterdam de la MBT, Maatschappij tot Bevordering der Toonkunst, la sociedad que ha sido citada anteriormente. Por ello se hace responsable del festival de música de Rotterdam, con Liszt y Anton Rubinstein como invitados en 1854.

En el año 1860 sucede a Lübeck como director de los conciertos Diligentia en La Haya y en 1864 de la orquesta Felix Meritis y de varias sociedades corales. Su trabajo de director le impide dedicarse a la composición, lo cual se puede deducir al comprobar que la mayor parte de sus obras pertenecen a su primer período.

Verhulst se convierte en la figura cumbre de la vida musical holandesa, especialmente en su faceta de director de orquesta. Así en el mes de mayo de 1879, celebrando el cincuentenario de la fundación MBT, dirige una importante serie de conciertos en la gran sala del Paleis voor Volksvlijt, el palacio de cristal de Amsterdam. “Joshua” de Haendel, la novena de Beethoven y su propia misa, “Mass” Op.20, además del estreno en los Países Bajos del “Concierto para violín” de Brahms con Joachim como solista.

El trabajo como director es muy importante, especialmente por sus grandes interpretaciones de la obra de Beethoven, Schumann, Gade y Brahms. Pero pronto empiezan las críticas negativas al no querer interpretar la nueva música, las obras programáticas de Berlioz, Liszt y especialmente de Wagner. Debido a ello, en 1883 debe dejar su plaza de director de la Orquesta Diligentia, puesto que recae sobre su colega de Utrecht, Richard Hol.

Disgustado por el trato recibido, Verhulst decide retirarse de la vida pública, dimitiendo de sus cargos en Amsterdam y refugiándose en la casa de su hija mayor en Bloemendaal, cerca de Haarlem donde muere el 17 de enero de 1891.

Richard Hol (1825-1904) nace el 23 de julio de 1825 en Amsterdam. Hijo de un lechero, pronto manifiesta su interés por la música. Estudia en la Escuela Real de Música de Amsterdam, obteniendo su título en 1844. Empieza como pianista, acompañando a cantantes y dando clases de piano, órgano y teoría de la música.

En 1854 descubre que su verdadera vocación es la de director de orquesta. A lo largo de su vida dirigirá los coros de la MBT, Maatschappij tot Bevordering der Toonkunst, la orquesta del Collegium Musicum Ultrajectinum de Utrecht y la Sociedad Diligentia de La Haya entre 1886 y 1901. Es organista de la catedral de Amsterdam desde 1875 hasta 1904.

La “Sinfonía Nº 1 en do menor” fue compuesta en 1863, recibiendo el premio de la Maatschappij tot Bevordering der Toonkunst al final del mismo año. Se estrenó en Utrecht durante el primer concierto de la temporada 1863-1864.

El primer movimiento larghetto, allegro con fuoco empieza con una pensativa introducción. Escrito en forma sonata, el primer tema es robusto con un pesado ritmo. El segundo tema es más característico por su ritmo que podríamos llamar holandés. El desarrollo se basa en diversos fugatos, dando paso a una recapitulación de forma abreviada y su coda.

El segundo movimiento larghetto está escrito en forma de lied. Un tema lírico que no llega a desarrollarse plenamente. El tercer movimiento presto corresponde al scherzo. Un tema rítmico de características germánicas de la escuela de Mendelssohn, con un trio más estático.

El allegro molto final alterna sus temas con reminiscencias del principio lento del primer movimiento. Empieza con una dramática introducción, antes de presentar sus dos temas, el primero más dinámico y el segundo más lírico.

La “Sinfonía Nº 2 en re menor” Op.44 fue compuesta en 1866 y está dedicada a los miembros del Collegium Musicum Ultrajectinum. Esta orquesta la estrenó a principios de 1867. Poco más tarde la Orquesta Felix Meritis la interpretaba en Amsterdam.

El primer movimiento lento, allegro molto agitato, empieza con una sombría introducción. El primer tema es agitado, el segundo presentado por la trompa es más tranquilo y melódico. Una obra que sigue la tradición germánica de Weber y Mendelssohn, con un amplio desarrollo en el que también se observan influencias de Tchaikovsky.

El segundo movimiento adagio, etwas bewegt, più lento lo titula como Preghiera. Un movimiento lírico pero sin llegar al sentimentalismo. El tercer movimiento presto, corresponde al scherzo. El estilo es el de los cuentos de hadas de Mendelssohn. El trio es mas personal y más relajado. Termina con la repetición del scherzo, apareciendo nuevamente el tema del trio en la coda.

Finaliza con un allegro con brio, un movimiento de gran fuerza rítmica, que había seguramente impactado en el público en su época. Una determinante coda concluye la sinfonía.

La “Sinfonía Nº 3 en si bemol mayor” Op.101 fue terminada en 1884. La dedicó a Anton Rubinstein que visitó los Países Bajos en 1868, 1878 y 1885. El 27 de noviembre de 1867 Hol había dirigido la “Sinfonía Ocean” de Rubinstein, lo cual nos hace pensar que empezó esta sinfonía mucho antes. Se estrenó el 6 de diciembre de 1884.

El primer movimiento einleitung und allegro nos muestra una obra con mas ambición que las anteriores, presentando un estilo más personal. La sección de desarrollo es más compleja revelando la evolución del compositor.

El segundo movimiento scherzo es de estilo de Mendelssohn, como el de su anterior sinfonía. Además lleva el subtítulo “Erinnerung an Mendelssohn, 4 November 1847”. Esto parece confirmar que al menos este movimiento fue escrito con anterioridad, en 1867.

El tercer movimiento Nachtmusik, es de carácter intimista, conteniendo dos interludios mas agitados. Termina con un finale con un primer tema exuberante y un segundo más pensativo. Encontramos citas del material usado en el primer movimiento. La coda nos trae el recuerdo de Dvorak.

La “Sinfonía Nº 4 en la mayor” fue terminada en la primavera de 1889. El primer movimiento lleva la indicación autógrafa “Domingo, 25 de julio de 1888, Utrecht”. En este año se inauguró el Concertgebouw de Amsterdam y en noviembre se realizaban los primeros conciertos. Pero la obra de Hol no se interpretó, quedando la partitura inédita. La obra ha sido editada y estrenada recientemente, en el año 2001 por la Orquesta de la Residentie de La Haya, dirigida por Matthias Bamert.

El primer movimiento andante sostenuto, allegro moderato, empieza con una sección lenta con influencias de Dvorak. El primer tema está lleno de dinamismo y el segundo contiene referencias nuevamente a la música de Dvorak. En aquella época Hol dirigía sus sinfonías. Después de la recapitulación presenta de nuevo el tema de la introducción.

El segundo movimiento presto corresponde al scherzo. Contiene una música fogosa, llena de vida. El trio también nos trae recuerdos de Dvorak. El tercer movimiento adagio non troppo tiene un carácter intimista. En la parte central el tema se vuelve más expresivo con cierta referencia al estilo de Brahms.

El último movimiento es un allegro vivace. Un tema agitado lleno de pasión abre el movimiento, seguido de un segundo tema también de carácter festivo. Un tipo de música del carácter de Mendelssohn, demostrando que es su evolución Hol no ha podido superar su estilo conservador.

Hol escribe muchas obras corales con textos holandeses, el oratorio “David” (1879) y dos óperas, “Floris V” (1892) y “Uit de branding” (1894), defendiendo siempre la creación de una música holandesa.

En 1895 por causa de una grave enfermedad se retira progresivamente de sus múltiples cargos. Muere en Utrecht el 14 de mayo de 1904.