GOLS

Xavier Gols i Soler (1902-1938) nació en La Canonja, población cercana a Tarragona, el 2 de noviembre de 1902. Su padre Josep Gols que también era músico le proporcionó las primeras lecciones. Estudió violín y piano. Trabajó como pianista acompañando al Orfeó Tarragoní que dirigía su padre.

Como compositor empieza a escribir canciones y música para piano. Su canción "Canticel" sería premiada en los Jocs Florals de Girona del 1922. "La serenata" fue compuesta en 1925, dedicada a su alumna de piano, Mercè Rovira, con la que se casaría el 28 de agosto de 1930.

También dedicada a su esposa compone la sardana "Mercè" hacia 1927. En este año gana la Beca Pau Casals, que le permite ir a Barcelona para estudiar piano con Blanca Selva durante un par de años y también recibir lecciones de Baltasar Samper. Trabaja como crítico musical de la revista La Nau desde 1928 a 1929.

Regresa a Tarragona en el mes de noviembre de 1929. Dirige el Orfeó Tarragoní desde 1930, complementando su trabajo con recitales y clases de solfeo y piano en el Conservatorio de Tarragona. Compone el "Poema del Divendres Sant" en 1930 y la "Suite pour piano" entre1928 y 1930, en cinco movimientos, Prelude, Menuet, Scherzo, Sarabande y Air à danser.

Durante los veranos de 1932 y 1933 realiza trabajos de investigación para el Cançoner Popular de Catalunya, lo que influiría en su obra al añadir elementos del folclore. Destacamos "De les terres altes: quatre impressions per a piano" compuesta en 1936 con sus partes Ametllers florits, al lluny... ,  Nènia, La tarda als cims y El llogarret en festa.

Con el "Quintet en re menor" (La filla del rei de France) compuesto en 1936, para dos violines, viola, violoncelo y piano, ganó un accèssit al Premi Felip Pedrell de la Generalitat de Catalunya.

"Tres preludis rurals" terminada en el otoño de1937, para orquesta de cuerda y piano, es su última obra, estrenada póstumamente por Baltasar Samper.

La Guerra Civil no interrumpe su labor creativa, pero una peritonitis fulminante termina con su vida en plena madurez, muriendo en Tarragona el 7 de febrero de 1938. Su fondo musical se conserva en la Biblioteca de Catalunya.

Sus partituras que se pueden comparar con las de Toldrà o Mompou, consiguieron una difusión internacional gracias a los conciertos que la pianista Claire Svecenski realizó en New York en 1935.